Daniel Sempere.
“Caminando por Alcalá…”
05 de Abril de 2010.
Amor vs egoísmo.
“Los oaxaqueños nos merecemos eso y más porque somos re agachados”.
Anónimo.
El amor se considera un sentimiento profundo e inefable de preocupación por otra persona, animal o cosa, esta concepción abarca una gran cantidad de sentimientos positivos, que evidentemente no existen en la clase política oaxaqueña.
Una muestra categórica de la ausencia de amor hacia Oaxaca es que hoy se peregrina en una entidad que no respira y mucho menos transpira paz, esto se debe a que no hay justicia y no hay justicia porque muchos de quienes dirigen las instituciones gubernamentales, políticas, sociales, culturales, económicas, etcétera, lo hacen de manera egoísta, privilegiando una conducta consistente en poner los intereses propios en primer lugar, y los intereses del grueso de la población, en donde la conveniencia política lo decida más que donde la sociedad lo demande, como si sus posiciones fuesen resultado de la generación espontanea y no de la voluntad popular.
Además de la corrupción rampante con la que se despliegan los funcionarios, en detrimento del Estado Oaxaqueño, donde más que cumplir con los verdaderos lineamientos éticos de la función pública lo hacen como si se tratase de una “defunción pública”.
Se toman decisiones donde priva la discriminación, la exclusión, el desdén, la soberbia, la arrogancia, el desplante, la insolencia, la desfachatez, la inmoralidad, y el unilateralismo insultante, así se hace política en Oaxaca, así se gobierna Oaxaca, así se vive Oaxaca.
Resulta grave ver hoy que el Estado navega en un mar de campañas políticas, que no haya una propuesta diferente y positiva en cuanto a las formas de hacer campaña. Ante la falta de capacidad imaginativa, las prácticas son las mismas de hace uno, cuatro, seis, doce años, donde se recure a las formas de siempre, como la exclusión de las militancias de los partidos, el acarreo, la entrega de laminas, cemento, despensas, la compra de votos, la recolección de credenciales y por supuesto la torta y el refresco para aderezar el ambiente, además de la participación del corporativismo como elemento de abono al voto duro, esto sin dejar de lado componentes como la blasfemia, la soslaya, la mentira y la desacreditación, que no son sino el último recurso del incompetente, ante la insuficiencia de elementos para convencer.
En política existe una norma que dicta que “la forma es fondo”, fundado en que la forma es el medio y el fondo es el fin, basado en este principio resulta terrible que las formas de hacer campaña sigan siendo tan o más oscuras que antes y que el horizonte pinte del mismo color, pero más desastroso resulta que la sociedad procure estas formas de egoísmo, a través la apatía, la desilusión, el abstencionismo o la inmovilidad, en lugar de expresar su verdadero amor por Oaxaca y tomar acciones que contribuyan en la reparación del entramado social, que definitivamente esta desgarrado, y después en la construcción de un sólido andamiaje que resista las embestidas de quienes más que sentir amor por Oaxaca, muestran todos los días su egoísmo hacia Oaxaca.
PUNTOS SUSPENSIVOS: Dicen que para pedir, primero hay que tener disposición para dar, así pues, como se atreven a pedirle al primer panista del país que saque las manos, si el primer priista de Oaxaca tiene metidos hasta los pies… ANAFRE: Ahora resulta que la clave para convencer a las istmeñas e istmeños están en ir a aquella región y decir que el candidato está enamorado de las “garnachitas y del pollo garnachero”…
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Atte.
Editorial "Puerta del Cielo"